A pesar de que es bien conocido el efecto benéfico de la práctica regular de ejercicio, es una práctica que no se realiza de manera cotidiana. Como evidencia está un estudio publicado en el 2018 por una revista muy prestigiosa “Lancet”. Este estudio incluyó 1.9 millones de personas de 168 países, los autores de dicho estudio concluyeron que más de un 1 entre 4 adultos, no cumplen con las recomendaciones de ejercicio o actividad física recomendada de manera semanal, la cual es de 150 minutos de actividad física moderada a vigorosa por semana (21 min diario). Otras publicaciones refieren que, de los estudiantes universitarios, menos de 1 entre 4 hombres y menos de 1 entre 5 mujeres realizan el ejercicio mínimo recomendado.
Se sabe que el ejercicio ayuda a prevenir un amplio rango de enfermedades no transmisibles como las enfermedades cardiovasculares y DM2 e incluso enfermedades mentales principalmente depresión, siendo la depresión una enfermedad ampliamente distribuida en el mudo, y que llega a causar discapacidad funcional, reflejado como abandono de los estudios, el trabajo o proyectos de vida, y lo grave de esto es que puede incluso evolucionar hasta el suicidio.
De acuerdo con diversos estudios epidemiológico específicamente en estudiantes universitarios, se reporta que del 12-50% de los estudiantes tienen uno o más trastornos mentales, con un incremento alarmante en la prevalencia o número de casos de estudiantes universitarios con depresión, con ideación suicida y auto daño no suicida. Esto llega a representar un problema no solo para la salud física y mental de los estudiantes sino también afecta su desempeño en la sociedad, puesto que se ve afectado su rendimiento académico, y puede llegar a tener repercusiones en su posterior desempeño laboral, con mayor tendencia al abandono del trabajo o sus estudios, lo cual representa una pérdida de capital humano para la sociedad a largo plazo.
¿Qué efecto tiene el ejercicio en el organismo? Varios estudios han mostrado diversos cambios fisiológicos, como la reducción del nivel de estrés, puesto que reduce la respuesta del organismo cuando nos enfrentamos a situaciones estresantes, lo que significa que protege contra los efectos dañinos del estrés. Mejora el estado de ánimo ya que se eleva la cantidad de endorfinas inmediatamente después de realizar ejercicio físico. ¿Y que efecto tienen las endorfinas? Son sustancias químicas que actúan a nivel de sistema nervioso y ayudan a reducir el dolor, dan la sensación de bienestar e incluso de euforia o felicidad. Es debido a las endorfinas que muchos atletas refieren sentirse eufóricos o súper felices cuando realizan ejercicio. La actividad física también ayuda a mantener la correcta función de las mitocondrias, las cuales son organelos muy pequeños que se encuentran dentro de las células y son las encargadas de la producción de energía. Es por ello que las personas que se ejercitan de manera regular tienen más energía para realizar actividades durante el día y mayor resistencia a la actividad física.
El ejercicio también se ha ligado al buen funcionamiento de varios neurotransmisores en el cerebro incluyendo serotonina, dopamina y noradrenalina, y en el correcto funcionamiento del eje hipotálamo-pituitaria adrenales. Este es el eje hormonal que nos permite responder frente al estrés, y se ha demostrado este eje hormonal (Hipotálamo-Pituitaria-adrenales) se encuentra disfuncional o alterada su respuesta frente al estrés en personas que sufren de trastornos mentales.
Como se puede observar, son varios los puntos sobre los cuales causa efectos benéficos la práctica regular de ejercicio, tanto que se ha llegado a estudiar la efectividad del ejercicio en pacientes con trastornos mentales y los resultados han mostrado que es tan efectiva como la psicoterapia.
Por otro lado la deficiencia en la práctica de ejercicio en adultos jóvenes, incluyendo a estudiantes universitarios, se relaciona con baja salud mental, obesidad, sobrepeso, abuso del alcohol y problemas de sueño, incluso mediante estudios se ha llegado a demostrar su relación con la ideación suicida, mostrando que a menor actividad física se presenta salud mental más deficiente, baja autoestima y es mayor la prevalencia o casos de intentos suicidas, por lo que los autores han llegado a la conclusión de lo importante que es el establecer programas dentro de las instituciones educativas para facilitar y motivar a los estudiantes a mantenerse físicamente activos.
Como puedes observar, son muchos los beneficios que podemos obtener al realizar actividad física regular, no sólo físicos o estéticos sino también emocionales. Así que en marcha¡¡¡ establezcamos un programa de ejercicio regular y contribuyamos a nuestra salud mental¡¡¡