Burnout
La vida de estudiante implica demandas y responsabilidades sobre los jóvenes. Aunque el estrés puede ser benéfico para enfocarnos en alguna tarea en concreto y resolverla, cuando el estrés se mantiene de forma crónica y además es excesivo, ejerce un efecto abrumador y trae consecuencias negativas, haciendo que las personas pierdan su capacidad de adaptación a diversas circunstancias.
¿Has escuchado hablar sobre el síndrome de BURNOUT?
Se trata de una reacción patológica cuando hemos estado sometidos a estrés emocional, interpersonal, laboral o escolar crónico. Las consecuencias del desgaste profesional o escolar tienen repercusiones en el desempeño escolar y puede prolongarse al grado de sentir que se perder la capacidad para cuidar de sí mismo y de los demás. Incluso puede llevar al abandono de las actividades diarias.
Se han realizado estudios en los que se identificó que los estudiantes de Medicina son vulnerables a padecer burnout, siendo presente al comenzar el ciclo clínico y que no mejora al terminar la carrera.
¿Cuáles son las causas?
De acuerdo con la literatura, intervienen factores personales como la privación de sueño, sobrecarga académica, desequilibrio entre la vida personal y académica, el sentimiento de incapacidad para enfrentarse a las responsabilidades o dificultades de la vida, experiencia difícil durante el periodo escolar, sensación de que incapacidad e ineficiencia en el desempeño de tareas, baja autoestima y autovaloración. También influyen factores como inflexibilidad por parte de las instituciones para que cumplan con su curso académico, falta de tiempo para alimentarse, descansar y el autocuidado, la exigencia de académicos, maltrato por parte de docentes y/o padres, falta de apoyo y ambiente estresante.
Este síndrome de agotamiento y despersonalización afecta también a una alta proporción de médicos residentes y si el estrés se hace crónico, sin oportunidad de recuperarse, llega a perderse la capacidad de autocuidado y de empatizar con los pacientes, por lo que reduce la calidad de atención a los pacientes. Por eso es tan importante darle atención y sobre todo prevenirlo.
¿Se puede evitar caer en burnout?
Por supuesto, han surgido varias intervenciones y cambios organizacionales a nivel institucional que ayudan a reducir el riesgo de burnout en médicos y estudiantes. Es importante promover y facilitar el que los estudiantes tengan actividades extracurriculares para equilibrar sus responsabilidades académicas. Por parte de los profesores, también pueden contribuir mejorando su relación con los estudiantes al ser más empáticos, fomentando la comunicación afectiva y animarlos de manera positiva, influyéndoles autoconfianza y fomentando el cuidado de su bienestar físico, social y familiar. Crear talleres de manejo del estrés, autocuidado y bienestar, prácticas de atención plena o mindfulness, flexibilidad horaria, trabajo en equipo y apoyo académico a las necesidades escolares requeridas por los estudiantes.
Así que, si eres estudiante y no tienes medidas de prevención en tu institución, puedes ser pionero y organizarte con tus compañeros para solicitar o buscar ayuda para mejorar el bienestar físico, mental y emocional. Recuerda¡¡¡ La vida de estudiante no tiene porque ser estresante al grado de enfermarte!!!! Tu puedes hacer mucho¡¡¡
Bitran M, Zúñiga D, Pedrals N, et al. Burnout en la formación de profesionales de la salud en Chile: Factores de protección y riesgo, y propuestas de abordaje desde la perspectiva de los educadores [Burnout in students of health-care professions. Risk and protection factors]. Rev Med Chil. 2019;147(4):510-517. doi:10.4067/S0034-98872019000400510